VIÑEDO
Cultivado en dos sitios excepcionales en el corazón de Adelaide Hills.

AÑADA
Buenas lluvias invernales llenaron el perfil del suelo en preparación para la primavera. Las condiciones húmedas y frías continuas durante la primavera retrasaron la brotación y resultaron en un crecimiento más lento de los brotes. Las lluvias de primavera fueron más altas que el promedio normal de invierno y resultaron en una mayor presión de enfermedades y pérdida de inflorescencias, algunas variedades se vieron más afectadas que otras. La floración ocurrió a finales de noviembre y el clima fue mayormente fresco, húmedo, ventoso y nublado, afectando negativamente la cuajada de frutos y reduciendo los rendimientos generales. Afortunadamente, finalmente salió el sol y pudimos madurar la modesta cosecha a niveles fisiológicos y de sabor óptimos, y la cosecha comenzó a finales de febrero y continuó hasta principios de abril.